martes, 17 de abril de 2018

Celulares en menores ¿En verdad no es perjudicial?

Estudios recientes señalan que el uso de celulares inteligentes en menores de 12 años suele tener graves repercusiones en su salud física y mental, integridad e inocencia. Darle un celular inteligente a un niño es como dejarlo que se meta al mar insupervisado y sin flotadores, mientras recién aprende a nadar. Ningún buen padre pondría a sus hijos en esta situación. Entonces, ¿por qué les abriría las puertas a un peligro potencialmente mayor, que son los celulares inteligentes?

Resultado de imagen para niños con celulares

Tal cómo una granada, estos pequeños aparatos pueden causar un daño inmenso, afectando directamente contra la salud y bienestar del menor. Al igual que una bola de nieve rodando cuesta abajo, volviéndose cada vez más grande, los daños causados por los celulares empiezan con pequeñas alteraciones en su ciclo de sueño, luego causan déficit de atención y posiblemente depresión o ansiedad, hasta crear una pelota de magnitudes catastróficas, capaz de destruir la felicidad de familias enteras. En la físico, causan problemas a la vista y obesidad; con todos los problemas que trae. Asimismo, de acuerdo a la Academia Americana de Pediatría (AAP), la radiación excesiva que estos equipos emiten puede causar serias enfermedades cómo el cáncer.


Además de los problemas de salud, existen numerosos peligros sociales que trae el uso de celulares en niños. El más común es lo que se conoce como “Cyberbullying”. Esto es como el acoso escolar normal, pero mediante las redes sociales. En estas los agresores “se pueden esconder tras las pantallas y anonimato” como señala la especialista en psicología infantil, Larissa Hirsch. Estos ataques pueden tener consecuencias gravísimas, cómo el suicidio de la víctima, que en este caso es apenas un niño. La inocencia de una persona joven es frágil como un globo, o como una muñeca de porcelana. Los celulares exponen a los niños a realidades que no tendrían por qué conocer a una edad tan temprana, como pasa con los anuncios o páginas de adultos. También a habido numerosos casos de abuso prolífico, pues estas personas se sirven de las redes sociales para ponerse en contacto con menores, haciéndose pasar por niños o niñas. Las agresiones de esta naturaleza incluyen mensajes de texto y fotografías inapropiadas y en caso extremo, la localización de los niños y su secuestro.


Por la propia experiencia sabemos que los celulares son distractores profesionales. Es más, son doctores de la distracción. si esto es un problema para los adolescentes y adultos, ¿Cuantó más delicado será para los niños? La mayoría de menores tienen diversas responsabilidad, ya sea escolares o del hogar; y, muchas veces, las dejan de hacer por preferir usar su celular para jugar, mandar mensajes de texto a sus amigos o para ver videos que no aportan nada a su desarrollo o inclusive lo impiden. De acuerdo a un artículo en la revista de la Asociacion de Investigacion de clientes, “Los celulares no son una distracción solo cuando se están usando, sino que el simple hecho de tenerlos cerca o al alcance es suficiente para captar la atención de un adulto, y más la de un niño, en el aparato y no en las actividades que deben realizar”.


Hay muchas personas que argumentan que los celulares pueden ser herramientas para el aprendizaje, o como él diaro la Nación lo plantea: “El celular es una extensión del organismo, vital para aprender y comunicarse”. Aunque es cierto que los celulares empezaron como herramientas, la realidad es que ahora no son usados como tales, y menos por niños. El tiempo que desperdician usando celulares se va en las redes sociales, en juegos inútiles, en videos sin sentido y con nada de contenido productivo, entre otros. Además, si un niño va a estudiar en línea, se le puede comprar un ordenador (el cual es menos distractor) o simplemente usar él de sus padres.


En conclusión, es un hecho de que los celulares inteligentes dañan gravemente la salud física y mental de los niños que los usan o poseen. Además, no es de extraño ubicar claros casos de acoso mediante redes sociales en escolares, el cual es más peligroso aún que el tipo común. También se han reportado muchos casos de agresión pedofílica a través del uso de los celulares. A parte de ser tan dañinos, es una obvia pérdida de tiempo por parte de los niños, y aunque se pueda decir que los celulares son herramientas, la verdad este no es su uso principal, y en muchos casos, ni secundarios. Finalmente, se puede plantear que los daños causados por estos aparatos pesan mucho más que sus ventajas en el caso de ser utilizados por menores.

11 comentarios:

  1. Es un tema definitivamente controversial entre los adultos que son padres, ya que si nos ponemos en su lugar es para ellos "más práctico" ya que les dan el aparato con el fin de distraerlos y no provocar malos ratos como discusiones o bochornosos incidentes durante un almuerzo en algún restaurante. En cuanto a mi opinión se refiere, Estoy de acuerdo con aquellos padres que no fomentan este tipo de actividad ya que hacen que el niño se desarrolle en todos los ámbitos posibles y de una manera netamente sensitiva.
    Bridgyth Querevalú

    ResponderEliminar
  2. La postura que ustedes tomaron es poco común actualmente, y sin embargo tiene mucho sentido. Los niños menores de 12 no tienen la madurez necesaria para tener un celular inteligente, siendo tan difícil limitar lo que pueden buscar o hacer dentro de estos aparatos.
    Daniela Reaño

    ResponderEliminar
  3. Un buen punto, muy bien argumentado, y bastante original. ¡Muy bien!
    Carolina Rodríguez

    ResponderEliminar
  4. Su argumento es muy convincente, sin embargo he leído que la tecnología ayuda a estimular los cerebros de los pequeños, y ustedes hablaron en el texto negativamente sobre este aspecto. Tendré que investigar más.
    Andrés Castaño

    ResponderEliminar
  5. Muy bien redactado, chicos. Sigan así


    Alessandro García

    ResponderEliminar
  6. Muy cierto. Mi hermano menor (tiene 9 años) es totalmente adicto a su celular. Pasa todo su tiempo jugando y viendo videos, llega hasta no estudiar bien por estar en su telefono. Le mostraré el texto a mis padres a ver qué opinan.

    Andrés Torres

    ResponderEliminar
  7. No sabía que el uso de celulares en niños era tan dañino y peligroso. Gracias por su trabajo, esta es información muy importante.






    Lucía Cárdenas

    ResponderEliminar
  8. Es un muy buen ensayo. Tiene muchas analogías pertinentes y originales. Me gusta el modo en que abarcaron el tema, dividiéndolo por campos, cómo por ejemplo medicina y psicología. -Ricardo Arteaga

    ResponderEliminar
  9. Completamente de acuerdo, bien redactado, ojalá este ensayo pueda llegar a muchos padres de niños pequeños para evitar tanto daño a nuestras futuras generaciones.
    Angela Torrico

    ResponderEliminar
  10. De acuerdo con el autor, los niños se convierten en victimas potenciales de la extorsion, abuso sexual, peddofilia, suicidio, secuestro y otros DESDE EL MOMENTO QUE RECIBE UN CELULAR CONECTADO A LAS RESES.
    Los padres deberán tener en cuenta que tampoco se puede prohibir siempre su uso.
    Tal vez el autor no ha precisado un determinado momento en que el menor inicia su etapa de independencia y que es en este momento que el padre debe buscar la condiciones y reglas del uso del equipo.
    El tema gira alrededor de estos enfoques.
    Buen trabajo.

    ResponderEliminar
  11. Felicitaciones por este ensayo, lo enfoca desde dos puntos importantes, sicológico y físico. Creo que los padres estamos llamados a "despertarnos" de este letargo, en nuestras manos tenemos la responsabilidad de las futuras generaciones, o dejamos que nuestros hijos sean seres totalmente aletargados, o luchamos para que ellos no pierdan el "arte" de vivir , de que seab chicos recios, con sueños por los cuales luchar y hacerlos realidad, que no pierdan el tener paciencia (saber esperar) , que no dependa su estado de ánimo de una maquinita. TebeTen un gran reto por delante

    ResponderEliminar

Comenta, ¿Sí?